Entrevista a Katniss Everdeen

​Llegue cerca del medio día, el distrito 12 se encontraba completamente reparado, la gente del lugar ya tenia una mejor apariencia. Caminé por la plaza en donde aun se notaban ruinas del edificio anterior. Me sentí abrumada de ver como pudo levantarse este lugar después de la gran tragedia.

Atravesé la puerta de la aldea de los vencedores, ya habitada por gente del distrito, vi su casa a lo lejos y a ella en la puerta vestida como normalmente podría vestir: un pantalón negro, botas militares y su muy conocida trenza de lado. Iba repitiendo en mi cabeza las preguntas que le haría, al llegar a ella me presente cordialmente ella dudo un poco en estrechar la mano y me invito a pasar.

Pasamos a la sala principal, me invito a sentarme ella se alejo un poco mientras jugaba con sus manos.

Muchas gracias por esta entrevista Katniss, se que no te gusta mucho todo esto del medio y la fama, pero ¿cómo te sientes después de los pasados acontecimientos?

Aliviada, -tarda un poco en contestar mientras esboza la primera sonrisa que noto-, paso mucho tiempo en que realmente me sintiera así, y aunque no estoy del todo bien, se que poco a poco podre recuperarme a mi misma.

Cuéntame, ¿realmente creías que todo esto pasaría?, que llegarías a este punto de poder ser libre?

Aunque se que los juegos ya acabaron y que ya no queda una gota de todo eso, aun no me siento del todo libre. No sabia y ni me pasaba por la mente que empezaría una revolución, yo, siendo una joven normal del distrito 12, que lo único que quería era mantener a salvo a mi familia…

Se detiene un poco para tomar aire, continuando jugando con sus manos.

Seguramente no querrás hablarnos ni un poco de lo que es pasar por una experiencia como el estar en los juegos, y si lo prefieres no entramos en ese tema…

Bueno, no es algo que me guste recordar, pero no me importa contar lo horrible que fue estar ahí, porque es algo que no me gustaría que volviera a pasar, no me gustaría deseárselo a ninguna persona, esas experiencia te dejan marcado para toda la vida, yo realmente creí que no volvería a ver nada fuera de ese campo, y cuando fueron los segundos juegos, solo tenia una cosa en mente y ya no era salvarme a mi misma.

En ese momento, su mirada cambio un poco, reflejaba un poco de miedo y al vez se notaba perdida, como si volviera revivir los momentos.

Los juegos del hambre realmente cambiaron la vida de todos los que se encontraron en ellos, ¿qué crees que te ayuda a superarlos poco a poco?

La verdad no creo que llegue a superarlos nunca, tal vez a olvidarlos por ratos, Petta me ayuda mucho en eso y yo lo ayudo a él, pero siempre regresarán eso terribles momentos, no superas el haber matado a alguien para poder sobrevivir, eso siempre esta detrás de ti, en las mas recurrentes y horribles pesadillas.

Cambiando un poco de tema y ya que mencionas a Petta, y ya que todo eso a terminado, ¿a que se piensan dedicar ahora, que es lo que seguirá en la vida de ambos?

Mientras piensa y analiza que decir, deja de jugar con sus manos para tomar una posición mas calmada y relajada.

Siendo sincera, no lo sé. Los juegos ya terminaron, y la revolución también llego a su fin.

Yo lo único que quiero es descansar, poco a poco tendré que adaptarme a esta tranquila vida, encontré el viejo libro de mi madre, tal vez comience a llenarlo, mientras que Petta espero que este aquí para mi, y yo poder estar para él.

¿Piensan involucrarse en algún trabajo relacionado con el Capitolio, o algo del gobierno del distrito?

¡NO!

No quiero tener que ver nada relacionado con eso, quiero realmente una vida tranquila, y aunque en momentos este aburrida o ya no encuentre que hacer, prefiero mil veces estar así a estar trabajando para el gobierno.

Entiendo perfectamente eso, pero y si en algún momento las personas llegaran a por ustedes, a pedirles que se dediquen o se involucren en el gobierno, incluso si les ofrecieran paga por ello, ¿Lo harías?

Tarda un poco en responder, pero toma una posición mas derecha y firme, dando la respuesta mas segura de la entrevista:

Jamás vendrán a buscarnos.

Sabiendo que ya no dira mas para esa pregunta, proseguí:

Y ya para culminar con esto, y dejarlos en paz para siempre con estos temas, ¿cambiarias algunos de los actos que realizaste en tus primeros juegos del hambre?

Ya me había hecho yo misma esa pregunta y anteriormente estaba segura de cambiar lo de las bayas si pudiera, pero ahora solo se que no, no cambiaria nada, peor estoy segura que tomare mis decisiones después de haberlas pensado claramente. Y aunque tal vez si pudiera cambiar lo de las bayas y lo hiciera, posiblemente mi hermana y mi madre estarían aquí, pero no podría estar yo para poderles dar la libertad que ellas merecen, o al menos la ayuda que antes les brindé.

Ahora mi hermana solo vive en mi corazón y en mi memoria, y yo volvería a sacrificar mi vida por ella si pudiera.

Al terminar de hablar ambas nos levantamos y caminamos hacia la puerta sin decir nada mas, me despidió amablemente con una sonrisa que mostraba paz y sinceridad, yo la devolví, agradecí de nuevo por su valioso tiempo, y salí del lugar con una nueva idea de la vida en mi mente.